Me sangran las encías

Sangrado de la encía
Sangrado de encia

El sangrado de encías es un signo objetivo de alteración de la salud bucal. Es decir, las encías sanas no sangran.
Momento: Las circunstancias en las que aparece el sangrado acostumbran a ser indicadoras del nivel de inflamación de la encía. De mayor a menor inflamación, pueden sangrar las encías: de forma espontánea, al comer, al succionar, al cepillado de dientes, al usar los cepillos interdentales o el hilo de seda. Este sangrado puede ser localizado o generalizado.
Sangrado al cepillado: Es la situación más común en la que aparece el sangrado de las encías. Es un error considerar el sangrado al cepillado como una situación normal por el hecho de que sea un sangrado discreto, ocurra con bastante frecuencia o no se perciban otros signos inflamatorios ni dolor.
Primer síntoma
Es bastante común darse cuenta de que sangran las encías al observar el color rojo de la saliva escupida al final del cepillado. Este hallazgo no es normal y como advierte el lema de un anuncio de un enjuague bucal: “Ignorar la sangre puede llevarte a la pérdida de dientes”

¿Por qué sangran las encías al cepillado?

Sangrado durante el cepillado
Las encías sangran porque están sensibles e inflamadas y, en consecuencia, no resisten el roce o presión del cepillado, ya sea porque la dureza de las cerdas del cepillo sea excesiva o bien porque la técnica de cepillado sea incorrecta y traumática.
Placa bacteriana
En la mayoría de los casos las encías se inflaman porque no se consigue eliminar de forma eficaz la placa bacteriana que se acumula en los dientes, bien porque no se realiza el cepillado con la frecuencia necesaria, se aplica una técnica inadecuada o el cepillo no está en buenas condiciones, o porque no se realiza la limpieza complementaria con los cepillos interdentales o el hilo de seda o porque no recurrimos a un enjuague que ayude a controlar la formación de placa.
Evolución
Las encías muy inflamadas llegan a sangrar incluso utilizando un cepillo suave. Esta situación no tiene buena solución si no se acude al dentista o al periodoncista, ya que cuanto más leve sea el cepillado para evitar el sangrado, más fácilmente se acumulará la placa bacteriana y, en consecuencia, más irritación e inflamación se producirá en la encía. Se puede llegar a la situación angustiante de que sangren las encías espontáneamente y aparezcan otros síntomas como el enrojecimiento, el aumento de tamaño de la encía y el mal aliento.
Solución
Los fenómenos inflamatorios característicos de la gingivitis son reversibles mediante un tratamiento periodontal de fase higiénica que tiene como objetivos eliminar de forma eficaz los irritantes acumulados en los dientes e instruir de forma detallada los métodos eficaces de higiene bucal.
Advertencia
Lo que empieza como una gingivitis puede convertirse en una periodontitis y acabar comprometiendo el futuro de los dientes.